Para alcanzar el bienestar psicológico y, en consecuencia, el equilibrio mental, es muy importante que empieces a escuchar tus emociones y a entenderlas. De esta manera, te darás el espacio para sentir y expresar aquello que llevas dentro.
Tanto si lo que sientes te provoca sensaciones de nostalgia o tristeza, como si te trae felicidad, aprender a gestionar tus emociones te llevará por el camino del crecimiento personal. Así, te será más sencillo alcanzar estados de felicidad y bienestar.
Si en este momento no te sientes satisfecho con tu vida, o se te presentan una y otra vez situaciones que no te traen felicidad, es momento de parar y analizar. Reflexionar profunda y sinceramente, te ayudará a llegar a la conclusiones necesarias para avanzar en tu desarrollo personal. El entorno tiene cierto peso en tu vida, pero, la única persona que puede actuar sobre su propio destino, eres tú mismo.
Las crisis o los problemas se seguirán presentando en la vida, sin embargo, eres tú quien puede escoger si crecer y aprender. Te pondré un símil sencillo: tus emociones son lo más parecido a las velas de un barco, si sabes manejarlas con soltura, te ayudarán a alcanzar tu mejor destino. Pero, ¿cómo aprender a gestionarlas?
Te dejo algunas claves que deseo te ayuden en tu crecimiento y desarrollo personal:
Déjate sentir todas las emociones que se presenten
Poner a funcionar todos nuestros recursos personales es la forma de aprender a vivir con mayor equilibrio mental. Si gestionas de manera asertiva tu parte emocional, sentirás que tu vida da un gran giro.
Todas las emociones que emergen de tu interior te está aportando una información valiosísima sobre quién eres, lo que quieres y lo que no. Incluso esas sensaciones que te parecen insignificantes, te están ayudando a tomar decisiones y a ser tú mismo. Estar atento a lo que sientes es una de las mejores maneras de descubrir qué es lo que de verdad te hace feliz.
Tu bienestar no está solo en el exterior, lo puedes llevar siempre contigo. Escúchate.
Haz espacio para dejar salir el dolor
El dolor es, con diferencia, una de las sensaciones más incómodas que puedes sentir. Sin embargo, dejarlo salir te ayudará mucho en tu proceso de crecimiento y desarrollo personal. Estas experiencias, aunque dolorosas, serán las que dejen en tu interior más enseñanzas, y por tanto, más evolución.
Vivimos en una sociedad que pone a nuestro alcance muchas `trampas´ para evitar que lo sintamos, para tapar y esconder el dolor. Es fácil que, de manera inconsciente, busques hacer esto a través de la comida, ropa, series u otros miles de entretenimientos. Sin embargo, permitirte sentir el dolor es la forma más sana de superarlo y evolucionar.
No pongas etiquetas a tus emociones
Puede que hayas interiorizado que las emociones son “buenas” o “malas”, sin embargo, es importante que tengas en cuenta que, todas tus emociones son igual de válidas. Tanto si te proporcionan experiencias positivas -alegría, generosidad o amor-, como si sientes dolor, miedo, celos o rabia. Todas ellas te están ayudando a entenderte mejor y a crecer. Cuanto antes dejes salir las emociones que te hacen sentir incómodo, antes se desvanecerán.
Si estás pasando por una situación que te provoca dolor, es muy importante que lo dejes salir. Esto no significa que te quedes anclado en la emoción sin avanzar, más bien es momento de analizarlo y ponerte a trabajar desde ahí: ¿por qué siento este dolor?, ¿cuál es la causa?, ¿qué podría hacer para sentirme mejor?
Las respuestas a estas preguntas pueden ayudarte mucho a conocer la raíz de tus emociones y proporcionarte bienestar.
Contágiate de emociones y crece
Una vez hayas pasado tiempo escuchándote a ti mismo, reconociendo tus emociones y sabiendo qué es lo que te puedes aportar a ti mismo para tu bienestar y felicidad, es momento de echar mano de algunas herramientas:
El contagio de emociones es una de las prácticas, y es que, las emociones son más contagiosas que la tos. Si has detectado que, lo que necesitas para tu bienestar es introspección, soledad y silencio, procura escoger personas que te ayuden a mantener esta línea y favorezcan tus necesidades. Sin embargo, si sabes que lo que te pide tu interior es salir de las responsabilidades, divertirte y disfrutar, escoge un entorno que conecte con ello.
Esto puede parecer muy obvio, pero en ocasiones, el miedo puede alejarte de tomar decisiones y apartarte de personas o situaciones que te hacen sentir incómodas o vacías.
Si llevas tiempo sintiendo un gran vacío interior, pero continúas eligiendo amistades o trabajos que no te aportan, este no se desvanecerá solo con el tiempo. La buena noticia es que siempre podrás romper con aquello que no te aporta o frena tu desarrollo personal, y dejarte contagiar por las ilusiones de otras personas.
Utiliza tus emociones para potenciar tu autocontrol
El primer paso para conocerte es observarte y dejarte sentir. Una vez hayas logrado esto, pasar al siguiente nivel te otorgará la maestría en el conocimiento de tus emociones. Se trata, ni más ni menos, que de potenciar tu autocontrol.
Si, por ejemplo, sientes ansiedad, debes saber que puedes usarla en tu beneficio. Te propongo un ejercicio muy sencillo:
Observa tus emociones y siéntelas. Deja que fluyan dentro de ti, que se expandan para conseguir que desaparezcan. Si te invade una sensación fuerte de ansiedad, y puedes enfrentarla por ti mismo, – ¡ojo! porque hay casos en los que es necesario contar con ayuda– , con el tiempo, podrás detectar de dónde nace esta emoción. Y, lo que es más importante, aprenderás a manejarla, y a hacer que desaparezca.
Si te interesa el crecimiento personal y quieres aprender a gestionar tus emociones para ser más feliz, te invito a reservar una sesión conmigo. También puedes leer más contenido mío en mi Instagram. ¡Estaré encantada de ayudarte!